Diversidad de voces: cómo afecta a las jugadoras la representación femenina en los videojuegos

Durante los más de treinta años que llevo de existencia he vivido momentos inolvidables, como mi pedida de mano en la que un desconocido decidió hincar rodilla delante de una docena de personas por se la única mujer jugando Tekken, o aquel otro día en el que decidí participar en un torneo y un caballero de brillante armadura persuadió a los desalmados que iban diciendo palabrotas delante de mi persona, "—Cuidado con el lenguaje chicos, que hay una señorita— dijo él"... ¡Y como olvidar aquel otro día que solo quería aprender a llevar a Jin Kazama y un señor atribuyó la amabilidad de los consejos a mi género! Como podéis comprobar queridos lectores, esta redactora ha vivido muy intensamente y salvando las distancias estoy hasta las narices.