Especial fin de año: las obras que más nos han sorprendido en 2022

Así se fue
Ya se marchó
Un año más que se esfumó

Xoel López

Se termina un 2022 que ha estado lleno de emociones fuertes, en todos sus ámbitos. En lo referente al nuestro, muy pronto podréis disfrutar de nuestra gala anual para elegir lo mejor del año, los Premios Canuck, cuyos nominados anunciamos en nuestras redes durante las pasadas semanas. Pero hasta entonces, y como despedida de esta vuelta de nuestro planeta circunvalando el astro solar, parte de la plantilla de Futoi Karasu nos hemos reunido para, en un ambiente un poco más cercano y personal, hablaros de aquellas obras que nos han resultado una sorpresa positiva e inesperada. No tienen por qué ser títulos de este año, simplemente escribimos de aquellos que nunca habíamos catado hasta ahora y que no habríamos podido prever que nos terminasen por gusta tanto como lo han hecho.

Clara Kujo – Live a Live

Sin duda, la obra que más me ha sorprendido este año ha sido el remake de Live a Live. Yo esperaba encontrar un JRPG clásico al estilo de Dragon Quest y otros de Square Enix, pero me maravillé al jugarlo y darme cuenta de que estaba ante uno de los títulos más revolucionarios del género. Lo más sorprendente de todo el asunto es que se trate de un juego que cuenta con casi 30 años a sus espaldas, y que, pese a eso, sea más innovador y fresco que muchos títulos actuales.

Aunque ya hablé largo y tendido en mi artículo propiamente dedicado a Live a Live, no quería dejar pasar la oportunidad de volver a recomendar a nuestros lectores este juego que hará las delicias de los amantes de los JRPG. Si buscáis nuevos títulos para jugar en este 2023 que se avecina, apuntad Live a Live en la lista de pendientes, os haréis un tremendo favor. Además, como cuenta con historias diferentes desde el punto de vista narrativo y jugable, es casi imposible que no os guste al menos una de ellas.

Jack Norman – Xenoblade Chronicles 2

A veces, un juego no te da lo que esperas. Otra te da eso e incluso más. Pero en ocasiones muy especiales subvierte unas expectativas base que no estaban muy altas. Así, mi gran sorpresa de este 2022 ha sido Xenoblade Chronicles 2 y su expansión, Torna – The Golden Country. Tras el poco poso que dejó en mí el primero, máxime viniendo de mi querida trilogía de Xenosaga, tenía miedo del 2. Las dosis de fanservice pocho, los diseños de Saito, el gacha de blades o el tono de la historia no auguraban algo tan sólido como lo que me encontré.

La obra tiene altibajos de ritmo, pero el corazón de su historia, su interesantísimo grupo de antagonistas y cómo muestra las consecuencias del dolor sobrepasan el resto de mis quejas. No contento con eso, Torna ofrece más y mejor, con un cierre tan dolorosamente redondo que se convierte por derecho propio en mi parte favorita de todo Xenoblade. Una grata sorpresa que hizo que me tragase, con gusto, mis palabras.

Live a Live / ©Nintendo

Ana of the Valley – Blue Lock

El primer capítulo de Blue Lock me suscitó dudas. Tenía ganas de verme el anime porque se hizo reconocido entre los fanáticos por no ser un spokon convencional en el que todo lo puede el poder de la amistad, sino todo lo contrario. Aquí el más egoísta es el que gana. Pensaba que toda la competitividad me iba a hacer sentir mal —soy muy empática en este tipo de ficción—, pero la relación entre el elenco y el proyecto surrealista que supone el Blue Lock dio lugar a que la premisa de «competitividad extrema» se me hiciese hasta divertida. Al fin y al cabo, la única repercusión que tenía perder era no poder jugar en la selección de Japón, lo cual no es el fin de la carrera de un futbolista ni de lejos —como mucho, supone el fin de un sueño adolescente con el que no empatizo ni de broma—.

Sin embargo, lo que más me enganchó y sorprendió de este anime fue la atmósfera que creó y un aspecto técnico inesperado. El que coincidiese con la Copa del Mundo tuvo un efecto curioso; era extremadamente divertido encontrar paralelismos entre los propios episodios de anime y la trayectoria del equipo de Japón —cuyas camisetas habían sido, curiosamente, diseñadas por el ilustrador del manga—. El fútbol profesional no me interesa lo más mínimo, pero este anime hizo que me picase la curiosidad por estrategias y maniobras del mismo que el protagonista ideaba algo más avanzada la trama, lo cual sin duda me sorprendió.

Leiachansan – El Pecado Original de Takopi

Posiblemente la premisa de la serie esté bastante manida desde el boom de Madoka Magica o títulos similares con protagonistas tan jóvenes. Sin embargo esta brilla más incluso dentro de esa premisa, por muy habitual que resulte el usarla como material para shock value. En Takopi consiguen un desarrollo de personajes mucho más profundo que en otras series que explotan estos recursos de manera indiscriminada. En tan solo dos volúmenes se consigue un elenco redondo, los cuatro personajes principales portan a la trama y consigues que el mundo de Takopi se vuelva real y no un display de drama telenovelesco innecesario. El dibujo también está lleno de vida y detalles y logra transmitir los puntos importantes de la trama acompañando a la misma y de una manera ambiental preciosa, usando los fondos como una forma más de storytelling. Tanto si no conocíais la obra como si ya habíais oído hablar de ella, es una recomendación ideal para acabar o empezar el año con algo que os marque.

Haqua, no / ©Tokyotoon

Hachedehelp – Marco & the Galaxy Dragon

¿Qué podría fallar en una visual novel sobre una huérfana convertida en cazatesoros galáctica que, junto a un dragón otrora devorador de mundos y hoy sin apenas poderes, surca la Vía Láctea en una Vespa parlante y termina por enfrentarse a una especie de primo lejano de Darkseid aún más maligno? Ya desde una recta inicial sin respiro nos demuestra que, pese a la apariencia de su material promocional, no estamos ante otra comedia ligera moe más, como alguno se podría temer. Los valores de producción son un auténtico derroche y durante las primeras horas hay más CGs por minuto que en cualquier otra novela visual que podamos recordar.

Pero la verdadera brujería de Marco & the Galaxy Dragon y lo que la convierte en un trabajo tan sorprendente no ocurre tanto en su excelente apartado audiovisual, sino en un guion tan mágico como caótico. Partiendo de una base constante de humor gamberro muy en la misma línea que la jacarandosa Teen Titans Go!, el título de Tokyotoon se permite tan pronto soliloquios sin un ápice de cordura y situaciones tan absurdas que podrían haber salido de un capítulo perdido de Bobobo como, lo que es más importante, veladas reflexiones de índole existencialista entre toda su algaraza fiestera. Cualquier obra que aproveche un tiroteo desquiciado e indiscriminado contra mutantes alienígenas cuyas cabezas tienen forma de calendario escolar como metáfora para teorizar sobre la toxicidad del amor ciego y servicial tiene mis más profundos respetos.

Lambolambs – Outer Wilds

El asombro ha sido mi bandera este 2022. He consumido anime, películas y videojuegos increíbles que han marcado hitos en un antes y después en su industria. Y de entre todos los títulos que podría hablar hoy, siento que necesito hablar de Outer Wilds.
Outer Wilds no es mi juego favorito que he jugado este año. Ni siquiera es de este año. Pero ha sido una experiencia que toda persona amante de los videojuegos debería experimentar al menos una vez. Y la razón de ello es que lleva al límite las emociones que un videojuego te debería hacer experimentar: emoción, suspense, intriga, miedo, sentido del deber, reflexiones…. Outer Wilds puede darte todo eso. O puede no dártelo. Porque cada experiencia cuenta y la tuya es más valiosa de lo que crees. Vivas como vivas este juego, estará bien. Y te tienes que quedar con ello.

Sin duda, Outer Wilds es el juego de explorar el espacio. Hay un espacio que explorar. Tienes, nunca mejor dicho, un espacio que explorar. Porque, a riesgo de ser redundante, vas a querer explorar este espacio. Al igual que vas a querer hacer mil cosas. Mis deseos para este 2023 vienen que todos tengamos experiencias como Outer Wilds: únicas y vivas. Que todos tengáis ese videojuego al que digáis ‘’ha sido un gusto jugar esto en 2023’’. Porque este es uno de los videojuegos con el que puedo decirlo en 2022. Y de paso, jugaos los Golden Sun si no lo habéis hecho. Me debatía mucho si hablar de Outer Wilds o de Golden Sun 2. Ambos juegos son increíbles. Qué tengáis un buen comienzo de año. Y continuación del año. Y final del año. ¡Todos los años!

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