Se oye hablar mucho de Stardew Valley, del cual posiblemente podríamos decir que es el Dark Souls de los jueguitos cozy, no solo de los jueguitos de plantar nabos. Y la verdad es que sería lógico achacar la floreciente industria de los juegos de granjas o con elementos de cultivar a que Stardew Valley sigue siendo a día de hoy uno de los títulos más jugados y comentados del género. No es para menos, ya que es sumamente entretenido y aporta horas y horas de jugabilidad, mezclando la gestión de una granja con otros elementos como la creación de relaciones con los demás personajes del juego. Sin embargo, y pese a que es una saga extremadamente popular y longeva, no se habla mucho de la que sirvió de influencia para Stardew Valley. Esta es la saga de Harvest Moon.

Harvest Moon (牧場物語, Bokujou Monogatari, lit. Historia de la granja) comenzó sus andaduras con un juego para SNES del mismo nombre, que salió en 1996. La obra original se distribuyó en años posteriores alrededor de los mercados americanos y europeos. La popularidad del mismo creció con las consecuentes entregas y consiguió un mayor reconocimiento no solo en su Japón natal, sino en el resto del globo, donde se volvería una saga con una popularidad discreta, pero logrando fanes fieles a la misma. Las mecánicas, desde el principio de la saga, se han definido principalmente por la posibilidad de gestionar una granja en aspectos como cultivar o criar el ganado y, además, interactuar con los distintos personajes del juego, con la posibilidad de llegar a casarte y formar una familia con ellos.

La saga consta de alrededor de 33 títulos solo en la línea principal, con numerosos spin-offs que exploran otros aspectos de la franquicia o incluso nuevos géneros, a veces algo alejados de los elementos tradicionales de gestión de granja. Sin embargo, en este artículo se pretende hablar de todos ellos, sino que se comentarán aspectos importantes de algunos de los títulos más significativos de la saga desde una perspectiva de curiosidad y alejándonos del aporte de datos técnicos de los mismos —todos sabemos usar una wiki—. Por lo tanto, vamos a empezar desde el principio y manos a la obra.

Harvest Moon (Super Nintendo Entertainment System-1996)

El primerito juego de la franquicia y, obviamente, eso se nota, pero antes de que tiréis tomates por decir que un título de SNES está viejo dad una oportunidad primero a la explicación. No es por los gráficos 2D, ni por la aparente falta de mecánicas de quality of life del juego —solo poder cargar con dos herramientas al mismo tiempo no es la manera más efectiva de hacer trabajo de granja—. Esto se refiere más bien a aquellas cosas que te hacen decir “es sin duda un producto de su tiempo”. Y es que este primer Harvest Moon, entre otras cosas, llegó censurado al mercado americano. Las bebidas que el jugador podía adquirir en el bar del pueblo, las cuales lo dejaban un poquito tinky winky ya que eras directamente alcohólicas pasaron a llamarse “zumos”. Sin embargo no hubo ningún otro cambio aparente, así que estos zumos mantenían sus propiedades alcohólicas. También incluían una iglesia, la cual en entregas posteriores se mantendría principalmente, en las más tempraneras o en remakes de las mismas, pero que iría desapareciendo poco a poco. Otra de las cosas que delatan la edad del cartucho puede verse tras contraer matrimonio. Una vez que el protagonista consigue casarse con una de las solteras del juego —casi los únicos personajes con un nombre propio y no descriptivo— estas se calzarán un delantal y se trenzarán el pelo para presentar la imagen de fiel esposa tradicional. Esposas que, por cierto, podrás camelar sabiendo lo que piensan de ti leyendo sus diarios privados, qué cruel. Si hablamos de otras cosas curiosas, pese a ser un juego que va de llevar una granja, solo tenemos cuatro cultivos disponibles sin contar el pasto. Por último, como jugadores tendremos un tiempo límite de más o menos dos años y medio en los cuales tendremos que sudar sangre, dolor y lágrimas si queremos obtener el mejor de los finales disponibles. Esto se mantendrá en algunas entregas de la saga, pero con el paso del tiempo irán cambiando hacia planteamientos que abogan por la jugabilidad infinita y sin una conclusión concreta a pesar de tener objetivos.

Harvest Moon GB (Gameboy-1997)

La segunda entrega de la saga fue considerablemente más simple en términos de de jugabilidad que la anterior. Teníamos más cultivos, eso es cierto, pero perdemos algunas de las características de la primera entrega, como por ejemplo la capacidad de casarnos. Puede que sea casualidad, o puede que no y que se deba a la aparición de la primera protagonista femenina de la saga, Sara. Posiblemente los desarrolladores no quisieran implementar el sistema de relaciones para los dos protagonistas, lo que implicaría crear nuevos personajes disponibles para la protagonista femenina —ya que comparte personajes con el Harvest Moon original y no existía ni uno solo masculino con el que hubiese posibilidades—. Sin embargo, el añadir a una protagonista femenina en una entrega tan cercana temporalmente a sus inicios ya nos demuestra lo popular que era la saga entre el público femenino. Por no hablar de que si comienzas el juego con la protagonista femenina recibes algunas herramientas y semillas extras. ¿Quizás una forma machista de darle ventaja a las mujeres? No lo sabremos nunca, pero la verdad es que el impulso extra al empezar está bien teniendo en cuenta que el juego vuelve a tener un Best End bastante complicado de obtener.

Harvest Moon 64 (Nintendo 64-1999)

En este Harvest Moon ya pasamos a la vista 3D e isométrica. No cuenta con protagonista femenina —un pasito pa’lante dos pa’atrás— y además tiene uno de los finales más complicados de obtener de toda la franquicia. Esto se debe a que el tiempo iba el doble de rápido que lo que era normal en el resto de entregas de la saga. El juego sigue la línea de tener que hacer el mayor número de cosas posibles antes del tercer año para poder conseguir una serie de fotos, que te llevarán al mejor final. El elenco de personajes en este caso cambia, esta vez estaremos tratando con los descendientes de las entregas pasadas. Sin embargo la única que aparece como tal sería Ellen —una de las solteras con las que podías casarte en el primer título—, mientras que los demás son solo mencionados de pasada, como los parientes, generalmente los padres, de los personajes. De hecho, Ellen toma partida en uno de los eventos más trágicos de la saga. A partir del segundo año dentro del juego, si el protagonista habla con ella mientras su sprite no se está moviendo, saltará un evento en el que presencias la muerte de Ellen. Desde este momento, su nieta estará de luto y Ellen por supuesto no estará disponible nunca más para conversar con ella en el juego. Sin embargo, si no hablas con ella durante toda la estación de primavera y pasas a verano, la señora simplemente no morirá, ya que el evento no saltará nunca más, lo que la convertirá en un ser inmortal. Al parecer también, al equipo encargado de la localización del juego les dio demasiada pereza traducir uno de los programas disponibles para ver en la televisión y decidieron cambiarlo por un canal que siempre está en estático.

Harvest Moon GBC 3 (Gameboy Color-2000)

Esta entrega como tal no es precisamente una de las más populares de la saga. Sus personajes no son muy memorables, debido seguramente a que —quitando apariciones en más remakes u otras entregas de la saga— no es posible casarse con ninguno de ellos. Al margen de la falta de elección en la obra, la cual ahora veremos en qué se origina, las forma de juego con las que se nos presenta sí son novedosas. Una vez más, podemos elegir entre un personaje femenino y uno masculino y en este caso nuestra elección cambiará la manera en la que podamos disfrutar de este Harvest Moon. Mientras que el personaje masculino se encargará de las tareas relacionadas al cuidado de los cultivos, la protagonista femenina se encargará del ganado. La relación entre ambos determinará lo bien que hace sus tareas el otro personaje y la cantidad de cosas que podrás ir desbloqueando en el juego para poder avanzar con el desarrollo de la granja. La única posibilidad si te quieres casar, en este caso, es con tu contraparte femenina o masculina, siendo el primer juego de la saga que nos presenta esta posibilidad. Sin embargo, una vez más podemos ver que aunque la saga incorporase una protagonista femenina, no siempre estaba a la par con las posibilidades que nos ofrecía el protagonista masculino. Y es que una vez que contraes matrimonio jugando como Sara la partida acaba para ti. Pero si juegas como Pete podrás continuar perfectamente e incluso tener un hijo. Simplemente los desarrolladores temían la idea de compaginar el embarazo y el trabajo manual. Esto no será la única vez que suceda, puesto que en diversas entregas posteriores la partida seguirá acabando una vez que la protagonista se case.

Harvest Moon: (More) Friends of Mineral Town (Game Boy Advance-2003)

Llegados a este punto tenemos que meternos dentro de todo el barro. Agarraos que vienen curvas. Los juegos de Mineral Town se lanzaron originalmente en dos entregas distintas, con un tiempo de diferencia. La primera fue la entrega en la que podemos jugar como el protagonista masculino, Pete, y más tarde saldría la versión de Claire, con algunas mejoras extras. Los juegos de Harvest Moon han tenido siempre una naturaleza poco convencional, en ocasiones podías encontrar detalles ciertamente extraños que acababan construyendo la imagen del juego y aquello que los fanes realmente aman de la saga, además de casarse. Y podríamos decir que en estas primeras entregas de GBA es donde esta naturaleza espontánea y con numerosos detalles explota. El juego tiene varios eventos entre los personajes que habitan en Mineral Town, y muchas veces el andar de un lado del pueblo al otro dará comienzo a una pequeña escena en la que aprenderás más de los personajes o presenciarás algo que hará que la historia de estos se expanda y parezca que la villa está realmente viva. Uno de esos eventos puede ocurrir cuando dejamos un bloque de Madera Dorada en el espacio cultivable de nuestra granja a modo de valla. Este objeto es uno de los mejores materiales dentro del juego para crear estructuras y además es uno de los más caros. Sin embargo, colocarlo como una valla parece que no le hace mucha gracia a tus vecinos y comenzarás a recibir visitas cada mañana en la que estos empezarán a hacer poco menos que amenazarte y perder puntos de amistad contigo hasta que decidas ser una persona razonable y quitar el maldito bloque de tu propio terreno. 

 También tenemos algunos fallos de traducción, bastante comunes en estos juegos más antiguos de la saga, en los cuales en ciertos diálogos o después de hablar varias veces con el mismo personaje obtendrás algunas respuestas en japonés o incluso en alemán. Qué políglotas. Pero con tantos eventos posiblemente encontremos algún conflicto, y es que manejar tantas variables iba a dar como resultado que algunas de ellas se solapasen o creasen discrepancias. En una ocasión Cliff, uno de los personajes masculinos del juego y un posible interés romántico, se desmaya en uno de estos eventos que lo involucran. Como resultado, debe estar unos dos días en cama en la clínica del pueblo, pero al haber solo una, si el protagonista se desmaya en el mismo periodo de tiempo obtenemos un pequeño extra dentro de la escena de la clínica. En esta Elli, la ayudante del doctor y una de las mejores pretendientas del juego —lo cual es una opinión completamente objetiva—, aparecerá arrastrando el cuerpo sin consciencia de Cliff a la parte trasera de la clínica.

En este punto los títulos alcanzaron una complejidad bastante significativa. No es que no la tuvieran previamente, pero en ese caso podríamos decir que la dificultad estaba basada específicamente en el límite de tiempo para poder obtener el mejor final posible del que hablábamos antes. Podríamos decir también que la fórmula a partir de estas entregas se basaba en el otro extremo del espectro, en la complicación basada en el tiempo que te llevaba conseguir algo. En estas dos tenemos varios ejemplos relacionados con los candidatos especiales para ser tus amorcitos, y es que tenemos cuatro: La Diosa de la Cosecha, disponible para el protagonista masculino, y el Gourmet, Kappa y Won para la protagonista femenina. Quitando a Won de la ecuación, puesto que su única característica distinta a los pretendientes normales es que no puedes comprobar su afinidad contigo únicamente mirando el corazón al lado de su sprite, tenemos otros tres pretendientes con requisitos cada uno más complicados que el anterior. En el caso de la Diosa de la cosecha y del Kappa—un kappa literal, no un mote o nada, no, un kappa—deberás enviar mínimo una unidad de cada objeto disponible en el juego a través de la caja de envíos en tu granja, pescar al menos una unidad de cada tipo de pez, minar todos los objetos de las dos minas disponibles, conseguir las nueve bolas, no de dragón pero sí de la Diosa o del Kappa y además deberás confesar en la iglesia el pueblo tus intenciones de casarte con cualquiera de los dos. Lo cual puede traducirse en una respuesta positiva por parte del cura o no y hasta que no consigas esa respuesta aprobadora no podrás tomar su mano en matrimonio. Mientras que las condiciones para casarte con el Gourmet no son necesariamente complicadas per se, es un trabajo de fondo, ya que mínimo te llevará 25 años dentro del juego conseguir cumplir todos los requisitos para casarte con él, debido a que solo aparece por el pueblo una vez al año para el concurso de cocina. Como curiosidad, ninguno de estos tres pretendientes vivirá contigo, ya que normalmente no pueden o tienen cosas importantes de personajes especiales que hacer, que no son pasarse en tu casa las 24 horas del día. Concretamente, las interacciones con Kappa serán de las más cómicas, porque ni siquiera casado contigo querrá verte la cara más de lo necesario.

Harvest Moon: (A/Another) Wonderful Life (Game Cube-2003/2004)

Posiblemente una de las iteraciones más populares y que más gente inició en la saga antes de los títulos de DS. Y no es para menos, pues el juego tenía muchísima personalidad, tanto los personajes como la historia brillan muchísimo y, a su vez, toca temas adultos y duros pese a no alejarse completamente de la esencia Harvest Moon y tener sus detallitos graciosos y curiosos. Por ejemplo, puedes obtener un osito de peluche, el cual se mueve cuando no le miras, un poco a lo Toy Story. Luego el muñequito tendrá conversaciones con tu hijo. Hijo que, por cierto, únicamente podría ser una niña y en la edición especial del juego. Además, para lograr esto debías hablar con Mr.Pots, un jarrón parlante, el cual tras iniciar diálogo con el 100 veces accederá a conceder tu deseo de tener una niña. Algunas de las partes más oscuras del juego tantean con la muerte y el duelo, aunque también tenemos infidelidades y problemas amorosos. Si decidimos no casarnos con dos de los solteros disponibles en la versión de la protagonista femenina, Muffy, una de las pretendientes de la aldea, tendrá algunas escenas descorazonadoras en las que asegura que al final ella “no era su novia, solo una chica más con la que divertirse” e incluso “que después de hablar con él un tiempo se dio cuenta hasta de que tenía hijos”. Bastante terrible para un juego E de Everyone pero de Everyone hates Muffy.

Harvest Moon DS (Cute) (Nintendo DS-2005)

La entrega de DS es, en mi humilde opinión, el Dark Souls de los juegos de granjitas. Y es que no es moco de pavo. Pese a que las mecánicas normales del juego y la gameplay normal puedan resultar simples, la dificultad escala bastante a la hora de referirse a detallitos o a objetivos concretos a lograr, algunos de ellos completamente opcionales y otros necesarios si queremos acabar la historia del juego. Pero primero algunos datitos graciosos, como por ejemplo, que los personajes son los mismos que en A Wonderful Life (AWL), supuestamente. Y solo supuestamente porque, por una broma en la versión japonesa, se supone que los personajes que vemos en la versión de DS son los descendientes exactamente iguales de los personajes de AWL. En la versión inglesa, pese a que se censuró bastante en ese aspecto, aún quedan algunos diálogos sueltos mencionando a antepasados con el mismo nombre que los personajes que nos encontraremos. No quiero saber cómo han tenido que ser las relaciones familiares en ese valle la verdad. También en la versión femenina, puesto que los candidatos disponibles no eran del gusto del público femenino joven, tuvieron que añadir un nuevo personaje masculino completamente basado en un guaperas de obra shojo, el cual podría paralizar a la chicas lanzándoles un rayo y así poder robar en paz por la ciudad. También es posible casarse con el señor que te vende ropa a través del teléfono si llamas las veces suficientes. Y no contentos con añadirte a estos dos partidazos, en la versión japonesa también permitieron “unirte en una alianza de mejores amigas” con las pretendientas consideradas personajes especiales del juego, como por ejemplo la Diosa de la Cosecha, la sirenita Leia o incluso la Princesa Bruja. Parece que les dio algo de pereza cambiar el sistema de matrimonio quitando el nombre y dejaron los diálogos matrimoniales y los eventos para conseguir casarte tal cual. Incluso podréis tener un hijo, el cual os es regalado por el Dios de la Cosecha. De hecho, con una de ellas, Leia la sirenita, podrías incluso realizar un divorcio express para siempre. El contexto de esto es que, al ser una sirena, tendrá que irse a vivir al lago para patos que añadas en cualquier zona de tu granja. Al ser el lago de patos considerado un edificio, este puede romperse en los vendavales que azotarán la granja en varias estaciones del año. Si el lago de patos se rompe con ella dentro su sprite desaparecerá y, aunque construyas otro estanque, Leia jamás volverá a aparecer en tu granja.

Volviendo a la parte complicada podemos hablar de muchísimas cosas. Están las más sencillas, como por ejemplo que tirar matojos al suelo mientras limpias los espacios de cultivo te penaliza automáticamente con pérdidas de amistad con absolutamente todo el pueblo. Cosa que no mencionan en ningún punto del juego y, además, es bastante común en todas las entregas de la saga por ser una forma rápida de lidiar con ellos. Hablando de bodas y casamientos, al igual que en Friends of Mineral Town algunas de las pretendientas son materialmente imposibles de casar para una persona normal, con la Diosa de la Cosecha, en concreto, siendo prácticamente imposible en la versión americana debido a un bug que te impedía cumplir uno de los requisitos. Los requisitos más demenciales de la Diosa son los siguientes: enviar todos los objetos disponibles y enviables en el juego al menos una vez, recoger todos los objetos disponibles en las minas y además conseguir rescatar a los 101 espíritus de la cosecha, lo que ya veremos que es una barbaridad de por sí. La Princesa Bruja tampoco se queda corta, solo que en el otro extremo del espectro. Para casarte con ella deberás haberle dado 10000 regalos en total, desmayarte de cansancio 100 veces, haber matado a 50 de tus animales y haber envenenado el puchero comunal en el evento de la comilona, intentando así matar a todos tus vecinos, durante cinco años distintos. Pasando a otra pretendienta más normal, dentro de lo que cabe, tenemos a Keira. Keira es tu chica, vecina y amiga, la cual vive durmiendo en el piso 255 de una de las minas, así que para hablar con ella y ganar puntos de amor deberás bajar cada día 255 pisos exactos de la mina. Si no era lo suficientemente horrible, el objeto que más puntos de afecto le da es el bloque de Madera Dorada infame de Friends of Mineral Town, que no es para nada barato. Hablando del tema de las minas, en el juego hay 4 disponibles. La primera tiene 10 pisos, la segunda 255, la tercera 999 y la última la mera cantidad de 65535. Una tremenda barbaridad, teniendo en cuenta que perdemos energía conforme bajamos y que como monstruos tenemos hasta a nuestro propio doppelganger, el cual querrá matarnos en las minas a toda costa. Dejando las minas atrás, vamos a pasar a hablar de los Espíritus de la cosecha. Estos adorables monigotillos desaparecerán al principio del juego junto a la Diosa de la Cosecha y tu trabajo como el granjero elegido será recuperarlos. Sin embargo, de estos 101 bichos algunos tendrán unos requisitos tan demenciales que seguramente no te plantees siquiera que su existencia en el mundo vaya a mejorar algo, salvo posiblemente que te ayuden a casarte, ya que encontrar 60 es uno de los requisitos para poder siquiera planteárselo. Algunos de las cosas que hacer para desbloquearlos son las siguientes: jugar al minijuego de cortar lana para cortarle la lana a tus ovejas 700 veces, hablar con tus animales 900 veces, jugar al minijuego de lavarlos y al de acariciarlos 500 veces cada uno, usar uno de los spas del juego unas 500 veces durante una hora cada vez, pescar 50000 peces, regar uno de los cuadraditos de siembra concretos disponibles en las áreas de tierra trabajables —cuadrado que cambiaba en cada juego y que además se podía encontrar en todo el valle excepto en tu granja— y, por mencionar uno más, enviar 100000 unidades de un ítem concreto producido en tu granja. Pese a que estos requerimientos son, como poco, una barbaridad, el juego ofrece una jugabilidad bastante amena, acompañada de una ambientación 2D preciosa y de eventitos también muy curiosos que harán del título una experiencia al menos única. Se recomienda encarecidamente que lo juguéis si podéis, ya que es el equilibrio perfecto entre la esencia Harvest Moon antigua y la nueva y que aún así se siente ameno de jugar a pesar de tener casi 20 años.

Harvest Moon: Magical Melody (Game Cube/Wii-2005/2008)

De Magical Melody podemos decir algunas cosillas como que, por ejemplo, es un juego algo plagado de bugs y cosas que se podrían haber mejorarado en el aspecto de calidad de vida. La versión de Wii, que fue la única que salió en Europa, también optó por quitar la protagonista femenina, por alguna razón inexplicable, mientras que la versión original de Game Cube mantenía a la misma. Pero de Magical Melody podemos decir que incluye a Jamie, personaje el cual cambiará de género dependiendo de qué protagonista elijamos, hecho que mínimo abre un debate respecto a su género. Jamie no era en principio un personaje disponible para casarse, y por lo tanto el juego termina una vez contraemos matrimonio con elle. Es imposible no mencionar la extraña estructura de los modelos chibi de los personajes, los cuales a pesar de su diseño superdeformed tienen una parte trasera digna de una Kardashian.

Numerosos títulos más salieron los años siguientes bajo el nombre de Harvest Moon, especialmente en Wii, DS y 3DS previamente al cambio de nombre. Estos empezaron a centrarse en los aspectos de personalización de personajes y del entorno, llegando a permitir al jugador decorar toda la ciudad al más puro estilo del Animal Crossing de 3DS de la misma época. Al mismo, tiempo la saga sufrió un cambio bastante importante, pasando a llamarse Story of Seasons. Esto se debe a que los desarrolladores originales decidieron cambiar de empresa distribuidora para los mercados fuera de Japón, mientras que Natsume, los distribuidores originales, seguían manteniendo los derechos del nombre Harvest Moon y, por lo tanto, fue imposible mantener el mismo para los siguientes capítulos de la saga. Mientras ahora los juegos originales se publicarían como Story of Seasons, Natsume crearía su propia franquicia, basándose en la fama del nombre original de la misma. Sin embargo, los nuevos juegos desarrollados por Natsume rara vez tienen la calidad de los Harvest Moon originales, lo que ha creado una sensación amarga entre los fanes de la franquicia, los cuales se ven periódicamente obligados a explicar como es que esos Harvest Moons nuevos que ves ahora en Steam no son los originales y que está totalmente fundamentado que te parezcan terribles y que no aporten nada más que una jugabilidad a medio hacer y una cantidad exagerada de DLCs.

Por lo tanto, si queréis acercaros a la saga a través de alguna de sus numerosas entregas o, simplemente, os cansáis de Stardew Valley y queréis probar algo similar, debemos recomendaros encarecidamente la saga. Cada uno de sus juegos no deja de tener una personalidad única y unos momentos y personajes que lo convierten en una experiencia disfrutable y, aún siguiendo las mismas fórmulas, diferente a las demás. Desde la familiaridad será capaz de aportar nuevas y refrescantes características, que hará de la partida algo único y una posibilidad de descubrir alguno de los numerosos secretos o cosas entretenidas que no para de ofrecernos. Siendo las entregas de Switch un juego nuevo y dos remakes de algunos de los juegos más populares, podréis disfrutar en la híbrida de Nintendo de todo lo bueno de un nuevo Story of Seasons y de un clásico Harvest Moon. Ya os guste grindear hasta la muerte o, simplemente, plantar vuestros nabitos y casaros podéis encontrar un lugar para vosotros en este simulador de granjas.