Opinión: ¿tienen las obras que ser complejas?

Tanto Avatar como Titanic son dos películas que, en su momento, aunaron taquillas multimillonarias con cierto desdén por parte de los cinéfilos más rimbombantes y especializados. No eran lo suficientemente complejas y profundas para cómo debería ser una película de su categoría, presupuesto y repercusión. Irónicamente, el director de ambas producciones, James Cameron, alcanzaba en … Sigue leyendo Opinión: ¿tienen las obras que ser complejas?